Rocío de Pentecostes 2017
La Hermandad del Rocío de Pozuelo de Alarcón, cumpliendo con su obligación anual como Hermandad filial nº 107, ha acudido con sus mejores galas a la aldea almonteña del Rocío, para asistir a los actos organizados con motivo de la Romería del Rocío de Pentecostés, que tuvieron lugar los días 2,3,4 y 5 del pasado mes de junio.
Para nuestra Hermandad y para los hermanos que tuvimos la oportunidad de asistir a tal evento, ha sido un placer especial el volver a encontrarnos con nuestra Madre, La Virgen del Rocío y recibir de primera mano sus bendiciones que perdurarán en el tiempo y que reforzaremos allá por el mes de octubre, cuando acudamos nuevamente en peregrinación hasta su ermita.
La numerosa asistencia de hermanos hizo posible el atender todos nuestros compromisos y además tener nuestros ratos de convivencia, dando cumplimiento al objetivo que conlleva esas dos cosas inseparables en El Rocío: la devoción a la Virgen y la confraternización entre hermanos y entre Hermandades.
Como gran novedad en este Rocío, quiero mencionar la posibilidad que hemos tenido, al disponer de las instalaciones de la Cooperativa del Vino de Almonte, de hacer todos los preparativos previos a la salida de la Hermandad en su recinto, lo cual nos llevó a tener todo más controlado y en mejores condiciones que en años precedentes. Nuestro agradecimiento a la gerencia de la Cooperativa por habernos facilitado nuestro trabajo.
Por primera vez también, pudimos guardar nuestras insignias en la capilla de la Hermandad del Gran Poder de Almonte, para desde allí engalanar nuestra carreta y comenzar nuestro camino hacia la aldea almonteña. Gracias a la Junta de Gobierno de la Hermandad por su magnífico ofrecimiento.
La misa de comienzo de la Romería la celebramos en la Parroquia de la Asunción de Almonte, conjuntamente con la Hermandad del Rocío de Cornella, con la que previamente habíamos hablado para realizar una Eucaristía compartida y también aprovechamos para imponer la medalla a tres hermanos que no lo pudieron hacer anteriormente.
Durante la tarde del sábado realizamos una visita a nuestra madrina, la Hermandad de Villalba del Alcor, para hacerle entrega de un ramo de flores y hablar de proyectos futuros con su Presidenta y su Hermano mayor.
Destacar la adaptación que nuestro sacerdote de Cana, D. Rafael, tuvo durante todos los días de la romería, sabiéndose integrar perfectamente en el ambiente del camino, de la casa y de todos los actos celebrados. Gracias D. Rafael por tu buen hacer.
Este año acudieron al Rocío un número importante de niños, nueve en total, que nos contagiaron su alegría y su saber estar, aportando momentos que nos dejaron un magnífico sabor de boca, tal y como podéis ver en las imágenes que os acompañamos.
Fueron muchos los momentos entrañables que la Hermandad pudo vivir, pero yo destacaría la entrada en El Rocío para hacer la Presentación ante la Virgen y ante la Hermandad Matriz y el camino desde aquí a nuestra casa Hermandad, con los encuentros con la Hermandad de Hinojos, con la Hermandad de la Puebla del Rio, con hermanos de La Visitación y con reuniones que cantaron a nuestro Simpecado a su paso, para terminar con la Salve antes de recoger nuestras insignias en el magnífico lugar preparado por los hermanos a las órdenes del vocal de Priostía.
No es el momento de destacar a nadie, pero no puedo terminar esta pequeña crónica sin agradecer la labor incansable de nuestro Alcalde de Carretas, en el que recae la responsabilidad de conducir a la Hermandad según lo previsto y estudiado.
Ya sólo queda el pensar en el año que viene y tratar de mejorar nuestra participación todo lo que podamos, para que así la Hermandad vaya creciendo y mostrando nuestros sentimientos rocieros a todos los que nos acompañen.
VIVA LA VIRGEN DEL ROCIO.
VIVA LA HERMANDAD DEL ROCIO DE POZUELO DE ALARCON.
Jesús G. García Ocaña – Presidente.
